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​Recorrido cíclico #1 (cruce de calles)

Después de estar dando vueltas por la ciudad te das cuenta de la imperiosa necesidad de continuar haciendo lo mismo día tras día, escuchas a algunas personas que dicen que eso es bueno, no entiendes muy bien de qué manera debe funcionar una persona medianamente normal para no volverse demente.

Comienzas a caminar en dirección a tu lugar de trabajo, de oficio, de estudio, hacía allá... De pronto te detienes en un cruce de calles, esperando a que el semáforo para carros cambie a rojo y de paso a los peatones para que crucen, tu eres un peatón, claramente.

En el momento en que el semáforo da el visto bueno al paso de los ciudadanos acumulados en la esquina, varios de ellos se abalanzan sobre el asfalto pintado de franjas blancas, tú resistes un momento para no comenzar a caminar con el tumulto y en un momento, que más adelante consideraras de gran lucidez, decides iniciar la alteración de tu rutina común, decides quedarte pasando la calle el resto del día.

Las ideas que concibes se ven más o menos de esta manera:

2.

1.

3.

Decides recorrer este cuadrado de circulación una y otra vez, lo haces sin expectativas ni esperanzas acerca de grandes descubrimientos, recuerdas de repente palabras escritas por alguien, no recuerdas su nombre, decía que “caminar sin un rumbo fijo en particular, o pasearse, es ya para la cultura de la velocidad de nuestra época una especie de resistencia.”, recordabas eso muy bien, casi se te había quedado grabado, pero sobre todo recordabas, por interés personal, la segunda parte de ese mismo enuncia que continuaba diciendo: “Pero resulta ser también un método muy inmediato para desplegar historias. Es un acto fácil y barato de representar”.

La parte que hablaba del “acto fácil” casi te encantaba, había un propósito de representación implícito en tus gustos, y obviamente en el acto que desarrollabas en ese momento, en la caminata inútil a los ojos de todo el mundo.

4.

Te das cuenta de que puede ser conveniente el hecho de hacer un registro de la acción, de paso podrías inventariar todo tipo de problemas o imprevistos que surjan en el transcurso de la acción. Revisas y resulta que el registro es una gran constante en la historia del arte. Paralelo a todo esto el registro equivale a una especie de arma dispuesta a hurgar. Grabas video, video como registro, como herramienta de producción, como medio de denfensa, alguna vez escuchaste a Bill Viola reconociendo a la cámara de video como una extensión del cuerpo, eso te llama la atención.

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